Un rasgo común de la diabetes es la muerte de las células productoras de insulina, las células beta-pancreáticas. Diferentes mecanismos – inflamación, daño del ADN, estrés oxidativo – han sido relacionados con la muerte de las células beta-pancreáticas, sin embargo, a nivel molecular, este proceso no ha sido descrito en profundidad.
Un reciente estudio dirigido por el Instituto Suizo de Tecnología, acaba de revelar que la familia de microARNs miR-200 interviene de forma activa en el metabolismo y regulación de la apoptosis de las células beta-pancreáticas. Específicamente, la producción masiva de los microARNs de dicha familia induce la muerte de las células productoras de insulina.
Estudios previos habían mostrado ya que los miembros de la familia miR-200 se expresan en las células beta-pancreáticas, y que contribuyen a su apoptosis en respuesta al estrés oxidativo. Sin embargo, no existían evidencias de su papel in vivo. A través de diferentes modelos genéticos y farmacológicos en ratón, los investigadores encontraron que la expresión de la familia miR-200 se eleva en las células productoras de insulina de los animales diabéticos. Y lo que es más, su sobreexpresión induce la muerte de las células beta-pancreáticas, así como la aparición de diabetes del tipo 2. Confirmando estos resultados, la eliminación de los miR-200 reduce la apoptosis de las células productoras de insulina y mejora los síntomas de la diabetes.
El grupo de investigadores, dirigido por Markus Stoffel, ya había identificado recientemente diversos microARNs relacionados con la función de las células beta-pancreáticas: una familia de microARNs necesaria para la división de este tipo celular en respuesta a la necesidad de insulina, y otra implicada en la cantidad de insulina que se produce. “Ahora hemos establecido que una tercera familia, miR-200 es responsable de la vida y muerte de las células beta,” indica Stoffel.
Los microARN son pequeñas moléculas de ARN no codificante, es decir ARN que no es traducido en proteínas, cuya participación en los procesos biológicos no ha hecho más que empezar a ser desvelada. Divididos en familias según su secuencia o estructura, estas moléculas regulan la expresión de genes implicados en el sistema inmune, enfermedades neurodegenerativas, desarrollo embrionario y cáncer entre otros. La identificación del papel de la familia miR-200 en la aparición de diabetes, así como la ruta molecular en la que participa, no sólo amplía el número de procesos en los que intervienen los microARNs, sino que también ofrece una vía farmacológica para el tratamiento de la diabetes. La inhibición de la actividad de los miR-200, concluyen los investigadores, podría convertirse en una estrategia farmacológica potencial para promover la supervivencia de las células beta-pancreáticas.
Referencia: Belgardt BF, et al. The microRNA-200 family regulates pancreatic beta cell survival in type 2 diabetes. Nat Med. 2015 May 18. doi: 10.1038/nm.3862.
Fuente: Link