Más de 5,3 millones de personas padecen diabetes en nuestro país. Para facilitar su adherencia al tratamiento, evitar complicaciones asociadas, como la hipoglucemia, y mejorar su sensación de independencia ya está disponible en España la insulina degludec, comercializada por Novo Nordisk como Tresiba ®, que supone, según los expertos, un gran paso adelante en el tratamiento de esta patología.
“Esta insulina, la primera de una nueva generación, proporciona no sólo el control del nivel de azúcar en sangre que necesitan los pacientes sino también prestaciones adicionales destinadas específicamente a mejorar su calidad de vida. Es, sin duda, un importante paso adelante, pues es la única insulina con una administración flexible, es decir, ofrece a las personas con diabetes la posibilidad de inyectársela a cualquier hora, adaptándose a sus necesidades.
Además, Tresiba ® reduce significativamente el riesgo de hipoglucemia, incluida la nocturna, la que más nos preocupa puesto que, en la mayoría de los casos, el paciente no la reconoce bien y puede progresar hacia una hipoglucemia más grave”, destaca el doctor Manuel Muñoz, endocrinólogo del Hospital Universitario San Cecilio de Granada. Por tanto, un avance especialmente significativo si se tiene en cuenta que las hipoglucemias son el principal riesgo que conlleva la convivencia diaria con la diabetes.
Ahora, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha dado luz verde a la insulina degludec Tresiba ® y está aprobado su reembolso por el Sistema Nacional de Salud, una insulina basal que se administra una vez al día y está indicada para el tratamiento de las personas con diabetes tipo 1 y tipo 2 que tengan más de un año.
La novedad que aporta Tresiba ® radica en su mecanismo de acción, convirtiéndose en la primera insulina que proporciona una duración de acción más allá de las 42 horas que permite reducir con éxito el nivel de glucosa en sangre a largo plazo (HbA1C) y el riesgo de hipoglucemias, con tasas significativamente superiores a insulina glargina.
“Contar con esta nueva opción terapéutica nos ayuda tanto a médicos como a pacientes a alcanzar los objetivos de control de la enfermedad. La seguridad, eficacia y flexibilidad que proporciona es un claro progreso no sólo por la libertad que aporta a los pacientes sino porque estos tienen también un riesgo reducido de hipoglucemias, un efecto secundario del tratamiento insulínico que les genera inseguridad y miedo. Mientras que para nosotros, los médicos, la hipoglucemia es un freno a la hora de iniciar o intensificar los tratamientos antidiabéticos. De esta forma, se cubren las principales necesidades y demandas de médicos y pacientes”, asegura el doctor Francisco Merino, jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario La Fe de Valencia.
Tal y como detalla el doctor Francisco Pajuelo, director Médico de Novo Nordisk, “esta innovación terapéutica es un ejemplo más de nuestra firme apuesta por la diabetes. Hemos marcado el camino a seguir en los nuevos tratamientos con relación al control glucémico y con la mejora de la calidad de vida. Y nuestro compromiso es seguir trabajando en esta línea para facilitar la vida diaria a las persones con diabetes y que no tengan que vivir pensando en la enfermedad. Hemos conseguido desarrollar una insulina que se adapta a la vida del paciente en lugar de que el paciente haya de adaptar su vida a la administración de la insulina”.
Experiencia en ensayos clínicos
La insulina degludec Tresiba ® está avalada por un amplio programa de ensayos clínicos, BEGIN, que ha contado con la participación de más de 11.000 pacientes. En diferentes estudios comparativos entre insulina degludec e insulina glargina, las personas tratadas con insulina degludec lograron reducciones similares del nivel de glucosa en sangre a largo plazo (HbA1C) y una reducción numéricamente mayor de la glucosa plasmática en ayunas, utilizando un menor número de dosis de insulina en la mayoría de los ensayos.
“Novedades de gran valor para los especialistas que tratamos a los pacientes con diabetes, los cuales también mostraron una mayor satisfacción y preferencia por insulina degludec frente a insulina glargina”, explica el doctor Muñoz. Asimismo, los pacientes que recibieron insulina degludec reportaron también menos casos de hipoglucemia nocturna, por lo que “los resultados avalan esta nueva insulina de la que van a poder beneficiarse adultos, jóvenes y niños. En estos últimos, las hipoglucemias son especialmente comprometedoras, sobre todo las nocturnas. Su cerebro está en desarrollo y los episodios de este tipo pueden tener graves consecuencias a largo plazo”.
Hipoglucemias: riesgos y consecuencias
En palabras del doctor Merino, “sabemos que las hipoglucemias implican inestabilidad en el control de la enfermedad, siendo un claro obstáculo para optimizar el control metabólico, y esto tendrá repercusión en la aparición y progresión de complicaciones más o menos graves de salud. Si se producen de manera repetitiva, pueden afectar al sistema neurológico y, en algunos casos, convertirse en un factor precipitante de demencia. También hay estudios que las relacionan con un aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares”.
Como constata el doctor Pajuelo, “las consecuencias de la hipoglucemia para el sistema sanitario son evidentes. En primer lugar, el propio tratamiento de la hipoglucemia ya comporta un consumo de recursos pero, sin duda, el problema fundamental es el coste que tiene el tratamiento para atender los problemas clínicos derivados de la misma”.