Cansado después de algunas horas de cocinar para su negocio de comida, Luis Mauricio, de 43 años, decide tomar una siesta para recuperar fuerzas; dice que se cansa muy fácilmente y que ya se siente viejo.

“Cuando se me sube el azúcar me empieza a doler la cabeza; y ahí ya sé que tengo que tomarme la medicina”.

Su verdadero problema, dice, es que no le gustan los doctores, “¿Para qué voy? Me hacen sentir peor diciéndome lo que no debo de hacer, y diciéndome que estoy malo. Mejor nada más trato de cuidarme y ya; es hasta más práctico”, comentó.

Este es un gesto característico de quienes padecen una enfermedad crónica, pues ante la pérdida de la salud tienden a deprimirse, y a negar su estado.

Álvaro Elías Pastrana, médico especialista en el tema y miembro de la Asociación Mexicana de Diabetes capítulo Ciudad Juárez, explicó que cuando una persona se entera que es diabética, se enfrenta a un cambio radical en su vida.

“Lo niegan, actúan como si no tuvieran nada pero sólo agravan el problema por no atendérselo a tiempo”, mencionó.

Es por ello que es altamente recomendable que estas personas sean atendidas de manera interdisciplinaria, para que asimilen su situación y puedan atenderse de manera oportuna; evitándose así complicaciones derivadas de la misma enfermedad.

“No podemos decirle a una señora que coma tal o cual cosa, o que haga ejercicio. No es sencillo para ella escuchar eso o practicarlo. Por eso hay que enseñarle cómo y brindarle apoyo emocional”, comentó Jesús Arturo Sánchez Alvarado, psicólogo al servicio de Pensiones Civiles de Gobierno del Estado.

En base a ello, en este lugar funciona el Centro de Educación en Salud, que tiene la finalidad de brindar una atención interdisciplinaria a los pacientes crónico-degenerativos en donde se incluye la participación del área psicológica y que va dirigida en específico para la población que se sirve de las atenciones de Pensiones Civiles.

La primera actividad del centro fue el arranque de la clínica de padecimientos crónicos, que tiene la finalidad de mejorar el control de enfermedades de este tipo, especialmente diabetes mellitus, hipertensión arterial, dislipidemias y obesidad.

“Siempre se han atendido estas enfermedades de manera separada y se tenía un control de esto, ahora es una intervención más directa; ahora no nada más le damos conocimiento de su enfermedad, sino que les explicamos cuestiones sobre el autocontrol, la alimentación y la conducta saludable”, relató.

Para estas funciones se utilizarán estrategias como la formación de grupos de enfermos crónicos y sus familias, para realizar actividades educativas, de reflexión y autoanálisis.

A unas tres semanas de que haya iniciado este proyecto, a estos grupos ya pertenecen más de 50 personas que acuden una vez a la semana para atender pláticas relacionadas con salud y enfermedad, significado de padecer diabetes, hipertensión, obesidad y taller de antropometría, dislipidemia y cardiopatías y alimentación saludable en síndrome metabólico.

Estas pláticas tendrán una duración de 12 semanas, y se desarrollarán dentro del edificio de Pensiones Civiles, ubicado en Paseo Triunfo de la República #4776 de la colonia El Colegio.

Esto no es muy distinto a lo que ya están realizando los miembros del Círculo de Diabéticos de la Cruz Roja, quienes han conformado una especie de club al que asisten una vez cada semana con la intención de compartir conocimientos sobre su enfermedad, y acciones que los han ayudado a sentirse mejor. (Karen Cano/El Diario)