La Asociación Valenciana de Diabetes (AVD) ha responsabilizado a la Generalitat de las "lesiones diarias" que sufren "miles de valencianos" desde hace un año por utilizar un material que, afirman, pone en "grave riesgo" su salud.
"Utilizamos siete veces al día unas agujas que desgarran la piel, que, en ocasiones, no nos inyectan toda la insulina que necesitamos o, por el contrario, nos doblan la dosis", afirma la Asociación en un comunicado, en el que añade que la vida de los afectados "depende de esas agujas y de la cantidad de insulina que reciben a través de ellas".
La presidenta de la AVD, Arantxa Cervera, ha denunciado el "calvario" que, según afirma, los insulinodependientes valencianos "sufren desde que hace doce meses la Conselleria de Sanitat decidió comprar y suministrar en los centros de salud unas agujas más baratas".
"Llevamos un año reuniéndonos con gestores y políticos sin obtener soluciones ni respuesta a nuestro problema, que es vital", afirma Cervera, que añade que es como "si a un enfermo de cáncer que empieza un ciclo de quimioterapia, de repente, se lo interrumpen o le suministran la mitad o el doble de la dosis pautada por su médico".
Tras muchas acciones, entre ellas un manifiesto firmado por asociaciones de afectados y profesionales sanitarios, la AVD "señala con el dedo a la Generalitat, a su presidente Alberto Fabra y a todos los miembros del Consell como responsables directos del detrimento de la salud de miles de valencianos con diabetes".
"Dispensando este material vulneran el derecho a una atención digna de la diabetes, porque se desentienden del bienestar de bebés, niños, adultos y ancianos con diabetes, y porque, una vez más, los enfermos crónicos pagan con sus vidas los recortes sanitarios.", ha concluido Arantxa Cervera.
La Conselleria de Sanidad, consultada por EFE, aún no ha ofrecido su versión al respecto.