David Lozano: “La diabetes sólo significa una
nueva forma de vida”
David Lozano ha querido salir al paso de algunos rumores que le han llegado tras
su ausencia en Igorre y las dos últimas pruebas de la Copa de España. El biker
catalán recibió la noticia de que padecía diabetes de tipo 1 a menos de 24 horas
antes de partir hacia la Copa del Mundo. Ante esta situación el propio David quiere
comunicar lo siguiente:
A veces la vida te sorprende
"Como muchos de vosotros sabréis en las últimas carreras no he acudido a correr ni
he podido/querido mostrar señales de vida en las redes sociales. No estoy enfermo,
no tengo miedo como se ha ido diciendo por diferentes sitios de internet, todo va
más allá y tiene un por qué.
Todo se remonta al pasado mes de noviembre. Estaba bastante en forma y me
sentía bastante bien encima de la bicicleta, corrí en Les Franqueses del Vallès y
notaba casi que las piernas iban solas, recuperaba muy bien de los esfuerzos, tenía
muchas ganas de entrenar y el objetivo era llegar en forma a las copas de España y
poder sacar unos buenos resultados vistas las sensaciones.
Cuatro días antes de ir a Gijón me dolía la garganta, tenía una pequeña infección
en el cuello pero no le di importancia, nada me iba a privar de ir a la copa España,
una vez en Gijón suena mal decirlo cuando estás luchando por hacer segundo pero
las sensaciones eran nefastas, no iba nada cómodo, muy desconcentrado y lo peor
era un tremendo dolor en la espalda, pensaba que podía ser el viaje, que era muy
largo. El día siguiente en Navia lo mismo, podía estar luchando delante pero no iba
con la soltura de las semanas anteriores.
Hablé con mi entrenador Jaume Mas y me mandó días de descanso pensando que
era cuestión de una acumulación de cansancio por culpa de viajes y entrenos. La
semana siguiente seguí entrenando de cara a Igorre con el último test en Mataró y
la verdad que ningún día estuve cómodo. Muchos días debía de parar a descansar
en repechos en los que semanas antes subía a plato, psicologicamente empezaba a
darle vueltas al asunto a ver qué podía ser la causa de mi pobre rendimiento pero
lo atribuía todo al cansancio como he dicho.
Después de correr en Mataró solo pensaba en la magnífica semana que me
esperaba en el puente de la Purísima y correr casi cada día que es realmente lo que
a mi me gusta. El lunes ya noté algo raro, no veía nada...así es, estaba casi ciego.
Normalmente la vista es una de las cosas que tengo perfecta en las revisiones,
incluso fui al oculista y me vio un poco de miopía pero nada exagerado como para
no ver nada. Los síntomas aumentaron. Orinaba unas 20 veces al día, bebía 8 o 9
litros al día, hasta el viernes tuve diferentes sensaciones.
A la hora de la comida, por curiosidad, me miré el azúcar en sangre con el aparato
de mi padre (es diabético) y estaba a 490, casi 5 veces superior a lo normal. Un
escalofrío recorrió todo mi cuerpo, sabía que eso era imposible si mi páncreas
funcionaba bien pero no se iban a truncar mis planes de ir a correr a Igorre y salí al
mediodía a rodar en bici con mi amigo Jordi. Durante todo el entrenamiento me iba
chocando con los árboles, me desequilibraba, me dolía la cabeza. Jordi y mis padres
me llevaron al hospital, me ingresaron de inmediato, no me dieron opción a nada,
no podía ir a Igorre, no paraban de hacerme pruebas, análisis de sangre, orina,
medían azúcar, preguntas de mis sensaciones en semanas anteriores, no me daban
de comer, solo tenía un suero puesto en la vena, por mi cabeza pasaba de todo y
nada bueno.
Por la mañana siguiente se presentó la doctora y nos dio la famosa noticia la cual la
gente ha sacado de contexto "eres diabético, de tipo 1", en ese momento solo me
fastidió la cara de mi madre al recibir la noticia. "Eso es lo que hay" pensaba pero
la pregunta era mucho mas sencilla que la explicación ¿podré andar en bici?"; y
todos me miraban con una cara de "tómatelo con calma colega". Yo no podía estar
con esa duda pero es la realidad, me tengo que dar un tiempo para conocer mi
cuerpo, como reacciona con los esfuerzos y cómo me adapto a mi nueva forma de
vida para poder ser otra vez yo y poder dar guerra en las carreras.
Cada día voy mejor tanto físicamente como en el tema de mi enfermedad pero eso
es lo que quiero dejar claro. Es una enfermedad pero yo me lo tomo como una
nueva forma de vida, que no suena tan mal. No quiero que la gente piense "pobre
chaval" soy uno mas, y sé, por la educación que me han dado mis padres y lo que
me a enseñado este bonito deporte que nada es fácil, que cada paso que das al
frente tiene que ser complicado pero superado con esfuerzo y volveré a rendir a mi
nivel aunque haya quien piense lo contrario.
Me fastidia que me haya tocado porque desde la barrera todo es muy fácil pero
esto va a ser mi motivación añadida a lo duro que es este deporte y, como no,
aprovechar todos y cada uno de los momentos buenos y malos que me va a brindar
a partir de ahora.
Mi terapia va a ser muy sencilla, voy a ir a correr todas las carreras que pueda para
poder regular mis dosis de insulina y de ingesta de glucosa y si salen mal pues
bien, y salen bien pues mejor, lo importante para mi ahora mismo es poder ser yo
en todos los sentidos. Parece que sea un "pupas" pero si cuento esto es para que
no se saquen las cosas de contexto como hasta ahora ha pasado. Un abrazo y feliz
Navidad, a comer turrones por mi".
David estará en el próximo ciclocross Internacional de Valencia con el objetivo de
seguir en su progresión y recuperación así como de continuar dando todo lo que
tenga para disfrutar de la bicicleta.
Fuente: Prensa BRI Sprots