No os podéis imaginar lo deliciosamente rico que está.... :mrgreen: :mrgreen: :mrgreen: :mrgreen:
Ingredientes
2 cucharadas de zumo de limón
1 pera madura, pelada y troceada
100 gr de mantequilla (en la receta indica 150 gr)
1/2 taza de tagatosa, aprox 80 gr (o 3/4 de taza de azúcar)
3 huevos
1 1/2 taza de harina de fuerza (unos 120 gr)
2 cucharaditas de levadura
1 cucharadita de canela
Un poco de nuez moscada
3/4 taza de nueces de california (en la receta original indica pacanas) (más o menos son unos 100 gr)
1 cucharada de tagatosa
Pepitas de chocolate negro (o trozos de choco negro sin azúcar)
¿Cómo?
Rociar la pera con el zumo de limón, para que no se ponga negra.
Precalentar el horno a 180ºC arriba y abajo con ventilador. Untar un molde de unos 20 cm con mantequilla o aceite.
Batir la mantequilla con la tagatosa hasta que quede una crema ligera. Añadir los huevos gradualmente batiendo cada vez. Una vez estén los 3 huevos, batir durante unos 5 minutos.Agregar la canela y la nuez moscada. Incorporar la harina previamente tamizada con la levadura, dos tercios de las nueces troceadas y los trozos de pera. Remover con cuidado.
Poner la preparación en el molde.
En un bol mezclar las nueces troceadas, la cucharada de tagatosa y las pepitas de chocolate. Cubrir la preparación e introducir en el horno durante 45 minutos. o 1 hora. A los 25 minutos quitar el ventilador y dejar sólo calor arriba y abajo. Muchos pensaréis que es un sistema raro, raro, pero es la única forma que he encontrado de que suban. Si observáis que se dora excesivamente la parte superior, cubrir con papel de aluminio de continuar horneando.
El pastel estará listo cuando al introducir un palillo en el centro salgo limpio. Sacar del horno y pasados 5 minutos volcarlo en una rejilla metálica para que se enfríe.
¡La casa se queda con un olorcito!
El bizcocho queda con una textura ligeramente húmeda por la pera. El chocolate le da un toque fantástico y en ciertos bocados se perciben más la canela que en otros y en ocasiones mata al resto de sabores. La nuez moscada apenas se nota. Esponjoso, suave y nada pesado. Caliente, recién salido del horno, está fenomenal.