La retinopatía diabética es la principal causa de ceguera en la población entre los 25 y los 75 años y la segunda en mayores de 75. En La Rioja 10.000 personas desconocen que padecen diabetes. Controlar la glucosa reduce un 50% la afectación ocular producida por la diabetes.
El Centro Cultural Caja Rioja-Gran Vía acogerá una nueva conferencia del Aula de Salud que mensualmente organizan la Fundación Caja Rioja y el Hospital Viamed Los Manzanos, dedicada a la pérdida de visión y, más concretamente, a la retinopatía diabética, una de las consecuencias de la diabetes.
El oftalmólogo y experto cirujano ocular, José Luis del Río Mayor, y Alberto Avenoza Mañas, presidente de Diabéticos Asociados Riojanos, hablarán mañana, martes 21 de diciembre, de 'La diabetes y la pérdida de visión'.
La pérdida de visión es una de las complicaciones asociadas a la diabetes (el riesgo de ceguera en el diabético es 25 veces mayor que el de la población general) y se produce a medida que la enfermedad se va desarrollando y los niveles de azúcar en sangre se mantienen anormalmente elevados, lesionando los vasos sanguíneos, los nervios y otras estructuras, pudiendo llegar a causar ceguera.
La incidencia de retinopatía se asocia, significativamente, a una serie de factores como son: la duración de la enfermedad superior a seis años, la presencia de proteínas en la orina (microalbuminuria), la falta de control glucémico y la arteriopatía periférica.
El buen control de la glucosa en sangre reduce en un 50% el riesgo de retinopatía diabética, lo que nos da una idea de la importancia del diagnóstico precoz para detener su avance.
En relación con la Comunidad Autónoma de La Rioja la prevalencia de la DM1 se estima en un 0,2% de la población que, aplicados a la población censada (330.000 habitantes), nos da una estimación aproximada de 660 pacientes con DM1.
Con relación a la prevalencia de la DM2 se estima en torno a un 10% lo que nos da una estimación de 33.000 pacientes con DM2 en nuestra Comunidad. Respecto a la incidencia, en el caso de la DM1 está cifrada en 10-12 casos nuevos por 100.000 habitantes/año, lo que proporciona una estimación de 35 a 42 nuevos casos cada año en La Rioja.
En cuanto a la DM2 se sitúa en 60-150 casos nuevos por 100.000 habitantes/año, lo que proporciona una estimación de 198 a 495 nuevos casos cada año en La Rioja.