Las principales causas para el desarrollo de cataratas: la diabetes y edad mayor a los 50 años.
El oftalmólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Jaime Carrillo Ceja, aseguró que entre las principales causas para el desarrollo de cataratas, está la diabetes y edad mayor a los 50 años, por el deterioro orgánico.
La catarata, enfermedad que provoca opacidad en una estructura ubicada en la parte frontal del ojo llamada cristalino.
Enfatizó que con la edad, el organismo "cambia totalmente y no lo hace sólo de manera externa sino que los cambios también se dan de forma interna, así como envejece la piel, aparecen canas, se vuelven más débiles los huesos, se debilitan los tejidos oculares y forman este mal".
Indicó que el 50% de las consultas con el oftalmólogo es por esta enfermedad, la cual suele afectar ambos ojos de forma lenta y progresiva por lo que se recomienda que ante cualquier alteración en la vista, la realización de una prueba de agudeza visual por personal capacitado.
Refirió que el principal síntoma de una catarata es la pérdida progresiva de la agudeza visual que se manifiesta por visión borrosa y destacó que aunque la edad favorece su aparición no excluye a personas jóvenes de padecerla, esto en relación estrecha a la aparición de diabetes a edades tempranas.
Afirmó que al tratarse de un proceso degenerativo en la mayoría de los casos, la catarata es difícil de prevenir, además de que aparece en una estructura como el cristalino la cual carece de irrigación sanguínea y por lo mismo no recibe nutrientes que ayuden a combatirla.
Para diagnosticar las cataratas se necesita una lámpara de hendidura, esta herramienta sólo puede ser manejada por un oftalmólogo, esta revisión tiene una duración aproximada de 20 minutos, donde le es dilatada la pupila al paciente para poder llevar acabo dicho estudio, dijo.
El único tratamiento que existe para esta deficiencia visual es quirúrgico y consiste en colocar un lente intraocular lo cual devolverá como mínimo un 80% de la visión que se tenía, esta intervención tiene una duración promedio de media hora y no requiere de mucho reposo pues basta con sólo un día de recuperación.
Recomendó que toda persona diabética tenga un mejor control de esta enfermedad para aminorar el riesgo a desarrollar cataratas y, en general, a quien rebase los 50 años, la realización de estudios de agudeza visual periódicos para captar anomalías de manera oportuna.