Los dentistas podrían ayudar a detectar la diabetes en personas sin diagnosticar o identificar a las personas con prediabetes, sugiere un estudio reciente.

Al identificar a personas con la enfermedad que no están conscientes de su afección, las revisiones dentales de rutina presentan una oportunidad para que los dentistas ayuden a combatir la epidemia de diabetes, aseguraron los autores del estudio, del Colegio de Medicina Dental de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York.

“La enfermedad periodontal es una complicación temprana de la diabetes, y alrededor del 70 por ciento de los adultos de EE. UU. consultan a un dentista al menos una vez al año”, dijo en un comunicado de la universidad el autor principal del estudio, el Dr. Ira Lamster, decano del Colegio de Medicina Dental. “Investigaciones previas se han enfocado en estrategias de investigación relevantes para ámbitos médicos. Los ambientes de atención de salud oral no se han evaluado antes, y las contribuciones de los hallazgos orales nunca se habían evaluado de forma prospectiva antes”.

Para llevar a cabo el estudio, que aparece en la edición de julio de la revista Journal of Dental Research, los científicos reclutaron a unas 600 personas que fueron a una clínica dental y a quienes nunca se había dicho que tenían diabetes ni prediabetes. De ese grupo, aproximadamente 530 pacientes reportaron tener al menos un factor de riesgo de la enfermedad, como hipertensión u obesidad. Los pacientes recibieron un examen periodontal y pruebas de sangre para evaluar la diabetes.

Los investigadores hallaron que tan solo el número de dientes faltantes y el porcentaje de bolsillos periodontales profundos podría ser eficaz para identificar a personas con prediabetes o diabetes no reconocidas.

Dado que uno de cada cuatro estadounidenses con diabetes tipo 2 no ha sido diagnosticado, y los que tienen prediábetes están en mayor riesgo de diabetes tipo 2 además de enfermedad cardiaca, accidente cerebrovascular y otros problemas vasculares, los autores del estudio dijeron que los hallazgos podrían proveer una forma relativamente sencilla de ayudar a combatir la epidemia de diabetes.