La acción prolongada y baja variabilidad cotidiana en el efecto regulador de la glucosa proporcionan potencial para que degludec, una insulina inyectable en la última fase de ensayo, pueda ser utilizada tres veces por semana, según se ha presentado en la reunión de la EASD.
De una dosis inyectable diaria a tres inyecciones a la semana: ésta es la aportación del fármaco degludec al arsenal terapéutico en desarrollo para la diabetes. Elaborado por la compañía farmacéutica Novo Nordisk y presentado en la XLVI Reunión Anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes, celebrada en Estocolmo, el medicamento es una insulina basal que forma multihexámeros solubles mediante inyección subcutánea, dando lugar a la formación de un depósito desde el que se absorbe esta insulina de forma continuada y lenta hasta la circulación. Así, su perfil de acción es lento y prolongado.
Chantal Mathieu, profesora de Medicina de la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica, ha explicado que los estudios de prueba de concepto en fase II realizados para valorar la eficacia y seguridad de degludec utilizada diariamente o tres veces por semana demuestran que esta insulina es bien tolerada y que mejora el control glucémico en personas con diabetes tipo 2 que no han sido tratadas con insulina previamente. "Tras 16 semanas de tratamiento con degludec, las reducciones de la hemoglobina glucosilada (HbA1c) son similares en los grupos que son tratados diariamente o tres veces por semana (-1,3 por ciento y -1,5 por ciento, respectivamente) y similares con glargina (-1,5 por ciento)".
Difícil de olvidar
Respecto a la pregunta de si los pacientes corren el riesgo de olvidar alguna dosis de insulina al no tener que administrársela de forma diaria, Mathieu ha comentado que "es difícil que olviden esta ventaja".
Según Mads Krogsgaard Thomsen, vicepresidente ejecutivo de Novo Nordisk, en Copenhague (Dinamarca), "su acción prolongada y baja variabilidad cotidiana en el efecto regulador de la glucosa proporcionan potencial para que degludec pueda ser utilizada tres veces por semana haciendo más fácil cumplir con el tratamiento de insulina. La tercera fase del estudio evaluará estas nuevas dosis con más detalle". De hecho, en la actualidad Novo Nordisk está llevando a cabo un programa de investigación en fase III, llamado Begin, para estudiar el perfil clínico de degludec. En éste participan 7.000 pacientes procedentes de doce ensayos
Otra característica importante de degludec es, en opinión de Rafael Simó, jefe de sección de Endocrinología del Hospital Valle de Hebrón, en Barcelona, que reduce el número de posibles hipoglucemias. "Un estudio que compara degludec con insulina glargina señala que las hipoglucemias son menores con el primero (77 por ciento frente a un 92 por ciento)".
Según Krogsgaard, "esto es clave porque con otros tratamientos los beneficios de un buen control glucémico suelen verse afectados por un mayor número de hipoglucemias".
Sobre liraglutida
Por otra parte, en la reunión de Estocolmo, Melanie Davies, profesora de Diabetes del Hospital Universitario de Leicester, en el Reino Unido, ha puesto de manifiesto que "es una percepción extendida entre los especialistas en diabetes que los pacientes prefieren las terapias orales a las inyectables para reducir su glucosa. Sin embargo, en nuestro estudio hemos hallado que los pacientes prefieren la insulina subcutánea liraglutida (Victoza, según su nombre comercial) al antidiabético oral sitagliptina, y lo demuestran continuando el tratamiento y recomendando Victoza a otros pacientes". El motivo posiblemente sea que liraglutida ofrece un perfil clínico superior y una mayor satisfacción con el tratamiento.
La diabetes del entorno familiar
En España, el 8,7 por ciento de la población es diabética. Según ha señalado Teresa Briones, asesora médica en diabetes de Novo Nordisk, a Diario Médico, esta patología también afecta de forma significativa al entorno familiar de los pacientes. Incluso, "hay estudios que dicen que cuando debuta un diabético tipo 1 en una familia, su madre deja de trabajar. Por eso son necesarios tratamientos seguros que aporten tranquilidad a los que rodean al diabético en caso de que sufra una hipoglucemia". Para Simó, que actualmente dirige el Grupo de Investigación en Diabetes y Metabolismo del Instituto de Investigación del citado centro, el problema de la diabetes es de gran magnitud; si no, "¿por qué 10.000 especialistas sanitarios se han reunido en Estocolmo para debatir sobre una sola patología? En la población mundial la diabetes es la principal causa de ceguera, insuficiencia renal crónica y amputaciones de miembros inferiores que no se producen por accidente".