La mitad de casos de diabetes se detecta cuando ya hay complicaciones
Durante el 54 Congreso de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición se ha hecho una puesta al día de las grandes cifras relativas a la diabetes tipo 2, que afecta al 13,8 por ciento de la población mayor de 18 años. En el 50 por ciento de los casos se diagnostica cuando ya existe al menos una complicación asociada al mal control de la glucemia.
Este ha sido uno de los asuntos abordados por Martín López de la Torre, especialista del Hospital Virgen de las Nieves, de Granada, y coordinador del grupo de trabajo de Diabetes de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), en el 54 Congreso de la Sociedad, celebrado en Oviedo.
Más de una tercera parte de los pacientes presentan algún grado de afectación renal y buena parte de ellos requieren tratamiento renal sustitutivo
Las complicaciones que se inician con anterioridad al diagnóstico alteran gravemente la calidad de vida del paciente y suponen un elevado coste sanitario.
En el caso de la diabetes tipo 2, López de la Torre ha destacado, además de su frecuencia e infradiagnóstico, su asociación a otras patologías. "Así, acontece con obesidad en más de la mitad de los pacientes y con hipertensión en más del 80 por ciento", ha señalado.
Retinopatía
La diabetes tipo 1 es mucho menos frecuente y las complicaciones tardan más en aparecer. "Sin embargo, cuando se manifiestan, los pacientes aún son individuos jóvenes. Además es necesario tener en cuenta la ansiedad que suele generar en la infancia y, sobre todo, en la adolescencia", ha añadido el endocrinólogo.
El coste de la terapia aumenta notablemente cuando ya presenta complicaciones micro y macrovasculares, superando los 2.000 euros al año
López de la Torre ha insistido en que el mejor momento para evitar las complicaciones asociadas a la diabetes es "cuando éstas aún no se han desarrollado; cuando la complicación renal, ocular, neuropática o vascular se produce, gran parte del daño ya es irreversible". Así, la retinopatía diabética es la complicación más frecuente del diabético y la primera causa de ceguera en el mundo occidental; además, más de una tercera parte de los diabéticos presentan una afectación renal de algún grado y más de la quinta parte que inician tratamiento renal sustitutivo son diabéticos.
Unido a ello, el coste que supone el tratamiento de un paciente diabético aumenta significativamente cuando ya presenta complicaciones micro y macrovasculares, superando los 2.000 euros al año.
Por todo ello los objetivos prioritarios en el abordaje de la diabetes deben ser, en palabras del endocrinólogo del hospital granadino, "su prevención, diagnóstico precoz, tratamiento temprano y proactivo y, si todo ello no es suficiente, abordar las complicaciones, con una implicación multidisciplinar y aplicación de protocolos de actuación coordinados y consensuados por las diferentes sociedades científicas".