¿Importa la 1ª o la 2ª gota del autoanálisis de glucemia en el control de DM1?
Un estudio holandés encuentra diferencias significativas
El objetivo de este curioso estudio, realizado Holanda sobre pacientes diabéticos mayores de 18 años tratados con insulina de Isala Clinics en Zwolle, entre septiembre de 2009 y febrero de 2010, fue ver si las concentraciones de glucosa capilar, medidas entre la primera gota y en la segunda gota de sangre, diferían ≥ 10% en diferentes cirsunstancias: no lavarse las manos, después de exponer las manos a fruta, después de lavarse las manos expuestas a frutas, y durante la aplicación de diferentes cantidades de la presión externa del dedo.
Se consideró relevantes en este estudio variaciones en la glucosa capilar iguales o mayores del 10% o una diferencia de 0.82 mmol/l . Aunque variaciones de 4,2 mmol/l fueron consideradas clínicamente relevantes.
Se estudiaron a 123 pacientes DM1. Se encontrándo un 2-4% de variación en los que la medida con la segunda gota fue igual o mayor del 10% que la primera.
-Si no se lavaban las manos, hubo al menos un 10% de diferencia comparado con el control en relación a la medida de la primera y segunda gota, encontrándose en el 11% (P inferior a 0.001) y el 4% (P inferior a 0.001) de los participantes respectivamente.
- Si se expusieron a tocar fruta antes, se encontró un 10% o más de concentraciones de glucosa en la primera gota en el 88% de los pacientes (P inferior a 0.001) comparado con el control. En el 11% de los casos la concentración de la segunda gota fue un 10% más alta que el control (P inferior a 0.001).
- Si se procedió a lavarse las manos tras manipular fruta se encontró que un 4% (P 0.001) y un 5% (P = 0.189) de los estudiados mostraron diferencias superiores a 10% en las concentraciones de glucosa en comparación con el control.
-En cuanto a las diferentes presiones sobre el dedo muestra que la concentración de glucosa se incrementa cuando la presión crece. Con presiones de 40 mm Hg se observan diferencias de un 10% con comparación con los controles en la primera gota y en la segunda en el 5% (P = 0.055) y el 10% (P = 0.009) de los participantes respectivamente. Con 240 mmHg se produce en el 12% (P = 0.018) y el 13% (P = 0.217) de los participantes.
Conclusión: Se recomienda lavarse las manos con agua y jabón, secarlas, y el uso de la primera gota de sangre para la automonitorización de la glucosa en la sangre. Si el lavado de manos no es posible, y no están visiblemente sucias o expuesto a un producto que contienen azúcar, es aceptable el uso de la segunda gota de sangre después de limpiar la primera gota. La presión externa puede conducir a lecturas poco fiables.