Tras cumplir su primera década de vida a finales del año pasado, la asociación gallega de personas con diabetes tipo I, Anedia, sigue creciendo.
Para atender a los 160 usuarios que tienen registrados en el área sanitaria de Vigo –casi un tercio del total–, ahora disponen de un local propio en la ciudad para poder dar atención en persona.
No es que hasta ahora no la dieran, pero tenían que citar a las familias en el Hospital Álvaro Cunqueiro para hacer las acogidas y solicitar al Sergas un local allí para poder impartir sus formaciones.
Gracias a la cesión de los abuelos de una de sus usuarias, Francisco Fernández Lijo y Pilar López Diéguez, ahora cuentan con un espacio de dos plantas en el número 12 de la calle Carlos Colmeiro Laforet.
Anedia se ha convertido en una pieza esencial cuando una familia recibe un diagnóstico tipo I. Comenzó atendiendo a niños.
Incluyó luego a los adolescentes y, desde hace dos años, incluye también a los adultos.
