Hola.
Como diabético tipo I desde hace 36 años, me gustaría darte algunas orientaciones.
- Desde luego no es precisamente una suerte que te diagnostiquen diabetes tipo I, pero sí lo es el poner disponer de los sensores. Como usuario de Dexcom desde hace 9 años, te diría que han cambiado mi vida. Ponte un sensor cuanto antes y aprende a utilizarlos, todo te resultará más fácil. Pero sé paciente, las cosas tardan tiempo en aprenderse.
- Aprende cuanto antes a modificar tu dosis de insulina en función de tu nivel de glucemia y de la comida. Cuanto antes sepas controlar tu glucemia antes normalizarás tu vida. Bueno, una nueva normalidad. Aprende a contar raciones. Descárgate la tablas que hay por internet, y después, hazte la tuya propia. Hace 30 años decían, y siguen diciendo, aunque ya no tantos, que hay que tomar hidratos de carbono de absorción rápida (pan, pasta, arroz...) de forma normal. Mi experiencia personal, y la de cada vez más diabéticos tipo I, es que cuanto menos hidratos tipo pan, pasta, arroz, menos cantidad de insulina rápida necesitas, y por tanto tienes menos riego de subidas y bajadas de glucosa. He tardado 30 años en quitarme el pan, porque me encanta, pero desde que lo he hecho, tengo menos subidas y bajadas después de las comidas. Mi dieta es equilibrada y por eso la mitad de mi dosis de insulina se la llevaba el pan. Si aprendes a contar raciones podrás calcularlo tú misma.
- Busca una forma de hacer ejercicio en casa cuando estés un poco alta. Siempre es más rápido y más sencillo bajar la glucosa andando en la cinta, pedaleando en bicicleta estática o subiendo y bajando las escaleras del edificio que estar metiendo insulina. Ojo, si estás demasiado alta no se debe hacer ejercicio físico, hay que meter primero insulina. Si te pasas de ejercicio te bajará demasiado. También se aprende.
- Contacta con una asociación de diabéticos y participa en las actividades. Te formarás mucho más rápido. No te fíes de profesionales que no tengan formación especializada y práctica. Si la enfermera o el médico no tienen formación específica no te orientarán bien.
- La rutina es tu mejor aliado. Eso no significa que no se pueda hacer casi de todo, pero deberías evitar grandes variaciones en tus horarios de sueño y de comida. La sensibilidad a la insulina cambia de manera importante según la hora del día. Si comes antes de las 14:30 necesitas mucha menos insulina que si comes a partir de las 15:00. Si desayunas más tarde, necesitas menos insulina que si desayunas pronto, pero también tienes más riesgo de levantarte alta. Esto es así por los llamados ciclos circadianos del organismo. La sensibilidad a la insulina cambia a lo largo del día. Si para una comida a las 14:00 necesitas 4 unidades de rápida, para la misma comida puedes necesitar 6 unidades si comes a las 16:00. Lo aprenderás con la práctica.
- Si eres constante y un poco sacrificada conseguirás no desarrollar complicaciones como consecuencia del mal control glucémico. Antes era extremadamente difícil, pero ahora, con los sensores es mucho más fácil. Resulta muy pesado psicológicamente estar pendiente de las cosas del día a día y de la diabetes a mismo tiempo, pero es muy importante mantener la cabeza bien amueblada y no tirar la toalla.
- Cuando tengas bajadas de azúcar, utiliza hidratos de absorción rápida. Evita madalenas, galletas, bollos... tardan en demasiado en subir y te meten fácilmente en una montaña rusa de subidas y bajadas. Te recomiendo llevar bricks de zumo exprimido de 125 ml (Don Simón los tiene, aunque esté mal decirlo). El zumo "exprimido" es el de mayor calidad, luego está el que "procede de concentrado" y luego el néctar, que la mitad es agua. 125 ml es una buena cantidad para remontar una hipoglucemia sin pasarse, dependiendo por supuesto de cómo estés de baja, la cantidad de insulina que te hayas puesto...
Cuídate.