Cuando te diagnostican una enfermedad, mucha gente echa mano de Internet, un lugar donde circulan mitos falsos que resulta poco aconsejable creer como, por ejemplo, en el caso de la diabetes. Ante esta situación, lo mejor es consultar con tu médico para que te resuelva todas las dudas.
La diabetes es una patología crónica que se caracteriza por unos niveles altos de glucosa en la sangre, debido a que el páncreas no produce insulina o que esta no hace correctamente su función: ayudar a que los azúcares de los alimentos lleguen a las células del cuerpo y se transformen en energía. Bajo esta premisa, ¿qué mitos circulan sobre esta enfermedad?
Los diabéticos solo pueden comer alimentos especiales
Te vamos a dar una sorpresa: un diabético puede comer de todo. El secreto está en hacerlo de forma moderada. Cierto es que algunos alimentos light que se venden para los diabéticos tienen menos azúcar, pero eso no quiere decir que no tengan grasas o hidratos de carbono y que se puedan comer sin medida. Lo mejor es apostar por una dieta saludable y equilibrada, aconsejada por el especialista.
Los diabéticos son más propensos a los catarros
No hay una relación directa entre ser una persona diabética y contraer un mayor número de enfermedades como los catarros o los resfriados. Lo más recomendable, y a modo de prevención, es que estos pacientes sigan las vacunas que se aconsejan en su caso, para evitar patologías que puedan complicar la enfermedad que ya tienen.
La diabetes está causada por comer mucho azúcar
El origen de la diabetes no está en comer dulces en exceso, como muchos pueden pensar. Es más, desde la Asociación Americana de Diabetes (@AmDiabetesAssn) aseguran que los alimentos con azúcar pueden incluirse en la dieta de una persona con diabetes. Lo único importante es limitar su ingesta.
Además, hay más factores que suponen un riesgo en este sentido. Por ejemplo, la diabetes tipo 1 tiene su origen en la genética y otros elementos que contribuyen a que se den las primeras señales de la enfermedad; mientras que la diabetes tipo 2 está muy relacionada con malos hábitos de vida como sufrir sobrepeso. Incluso la raza es uno de estos factores: las personas de origen africano, hispano, indoamericano o asiático tienen mayores probabilidades.
Solo afecta a las personas de edad avanzada
No es una enfermedad exclusiva de las personas mayores. Cuando el cuerpo no produce insulina y hay que inyectársela, estamos ante una diabetes de tipo 1 que se suele dar en niños o jóvenes que rozan la treintena. Sin embargo, cuando el cuerpo sí produce esa sustancia, pero no es suficiente o no cumple su función correctamente, es cuando estamos ante una diabetes de tipo 2, que prevalece más en la población mayor de 40 años.