Niko no tiene piernas pero a diario sale a bordo de su patineta para ir a cantar rock en las calles del Centro de Monterrey, pero debido a que padece diabetes requiere de insulina.
MONTERREY.- Alegre y positivo, Nicolás Meléndez, alías "Niko" se recarga en un banco para hacer magia con sus manos mientras platica y ríe con los peatones.
"Niko" no tiene piernas a consecuencia de la espina bífida con la que nació, pero ni eso ni la diabetes que padece a sus 40 años lo detienen para salir adelante.
A los pocos segundos, los acordes de alguna canción de rock se mezclan entre la multitud y comienza una pasión que desde hace años se ha convertido en su fuente de trabajo en la calle Morelos del Centro de Monterrey.
A bordo de su patineta a diario sale de su casa para ir al trabajo, hacer el súper o reunirse con sus amigos.
Y aunque el dinero que recibe por cantar en las calles le es de gran ayuda, no siempre ha podido cubrir sus gastos y sobre todo sus medicamentos que tienen un costo de 600 a 800 pesos quincenalmente.
Para ayudar a Nicolás a comprar la dieta especial e insulina que requiere para su diabetes, puede comunicarse al teléfono 818 462 49 49 y 811 730 17 57 con Manuel Balderas, un amigo de antaño.
Su carisma y sentido del humor han creado lazos con personas que comparten el gusto por la música y son ellos quienes el próximo 20 de diciembre en el bar Morrison del centro de Monterrey darán un concierto para apoyarlo.
Sin importar su discapacidad y con el rock como sello, Nicolás está comprometido a ganar las mil batallas que puedan presentarse.