El consumo de alcohol puede ralentizar la pérdida de peso a largo plazo a pacientes con diabetes tipo 2, según ha evidenciado un estudio realizado por investigadores de la Escuela de Enfermería de la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos), publicado en la revista 'Obesity'.
Para alcanzar esta conclusión, en el trabajo se realizó un seguimiento de cerca de 5.000 personas con sobrepeso y diabetes durante cuatro años, a quienes dividieron en dos grupos: uno de intervención de estilo de vida intensivo (ILI) y el otro en un grupo de control consistente en educación y apoyo para la diabetes.
Los datos mostraron que los participantes en el grupo ILI que se abstuvieron del consumo de alcohol durante el periodo de cuatro años perdieron más peso que los que tomaron cualquier cantidad durante la intervención.
"Este estudio indica que si bien el consumo de alcohol no se asocia con la pérdida de peso a corto plazo durante una intervención en el estilo de vida, se asocia con una peor pérdida de peso a largo plazo en los participantes con sobrepeso u obesidad y diabetes tipo 2", han aseverado los expertos.