La Fundación para la Diabetes recuerda que hay que seguir unas normas para poder disfrutar del Camino de Santiago con total seguridad y disfrutarlo al máximo.

La divulgación de la actividad física entre personas de todas las edades es uno de los mayores retos en nuestra sociedad; la rutina diaria nos acerca cada vez más al sedentarismo, un hábito peligroso para nuestra salud.

Hacer ejercicio diariamente conlleva grandes beneficios para cualquiera, sea cual sea su edad o condición física, pero lo es aún más para personas con diabetes, enfermedad que no les impide poder participar en actividades físicas como recorrer el Camino de Santiago.

Sin embargo, poder superar este reto para un diabético conlleva una serie de principios que hay que tener en cuenta para poder controlar la enfermedad y disfrutar de la experiencia al 100%.

La Fundación para la Diabetes, con motivo del reto ‘Camina por la Diabetes a Santiago’ ha configurado un útil decálogo de consejos para hacer el Camino de Santiago con diabetes. El decálogo está estructurado en dos grandes secciones; una centrada en los preparativos y consideraciones previas al viaje y otro de prácticas recomendables mientras el diabético recorre la ruta jacobea que detallamos a continuación:

Los preparativos antes de hacer el Camino de Santiago

Primeramente los expertos de la Fundación para la Diabetes recomiendan una preparación física de unos tres meses para el peregrino diabético con un entrenamiento progresivo y regular adaptado a las condiciones físicas y de edad de cada persona. Al mismo tiempo hay que hacer una visita al médico para informarle, pedirle consejo nutricional y que adapte el tratamiento a estas condiciones.

Por último se avisa a los diabéticos que se vean en la necesidad de tomar un avión para llegar al inicio del Camino de Santiago que es imprescindible portar un informe médico que acredite que padecemos la enermedad y que es necesario que llevemos con nosotros varias herramientas, como el glucómetro, bolígrafos de insulina, medidor continuo de glucosa, etc.

No menos importante para el diabético que quiere recorrer la ruta jacobea es qué llevar en la mochila para hacer el Camino de Santiago. Es importante llevar la insulina suficiente para el total de días que vamos a caminar, además de una cantidad extra y un kit de glucagón. Según recomienda la Fundación para la Diabetes, también es necesario llevar una nevera portátil para mantener a la temperatura adecuada todo el material médico, previniendo que algunos albergues puedan no contar con frigorífico.

Por lo demás, las consideraciones en cuanto a lo que debemos llevar al Camino son comúnes a todos los peregrinos: calzado adecuado al terreno y preferiblemente usado y ropa cómoda, ligera y apta para la práctica del deporte.

Consejos para diabéticos mientras recorren el Camino

Cuando el diabético recorre las etapas del Camino, se producirán cambios en los niveles de glucosa en sangre (como en toda práctica de ejercicio físico). La Fundación para la Diabetes recuerda que es necesario medir el nivel de glucosa antes, durante y después de la actividad y también realizar un control de glucemia antes de irnos a dormir.

Si para todos los peregrinos es importante llevar siempre encima algún alimento para ingerir mientras caminamos (barritas energéticas, bocadillo, pieza de fruta, galletas), lo es aún más para un diabético; para contrarrestar hipoglucemias hay que llevar alimentos como hidratos de carbono de absorción rápida que contengan azúcares. Una vez finalizada cada etapa, como ocurre con todos los peregrinos, hay que cuidar especialmente los pies, limpiarlos, masajearlos y cambiar el calzado por unas sandalias para dejar que descansen.

No hay que olvidarse de la hidratación, para lo que se recomienda ingerir unos 3 litros de agua por día, variando la cantidad dependiendo de las condiciones meteorológicas y de la duración de cada etapa. La Fundación para la Diabetes recuerda que al eliminar glucosa por la orina con la hipoglucemia se es más propensos a deshidratarnos, por lo que hay que beber más agua de lo normal, siendo esta siempre embotellada. Se recomienda el consumo también de bebidas light e infusiones, vigilando siempre en las etiquetas qué carbohidratos se están consumiendo.

Estos son varios consejos para hacer el Camino de Santiago con diabetes, pero te recomendamos que también le eches un vistazo a nuestros consejos comúnes para todo tipo de peregrinos.