Desde niños prematuros hasta cambios en el ADN, demencia, pérdida de sueño y mayor probabilidad de desarrollar diabetes. Todo esto trae la contaminación del aire y... más: muerte.

No son inventos ni especulaciones. Son resultados de ocho nuevos estudios -publicados solo este año- sobre los efectos nocivos de la polución, tan común hoy en muchas ciudades del planeta, Medellín incluida.

En el último de ellos, en el reconocido journal Nature, los científicos estudiaron por primera vez en vivo las emisiones en condiciones reales, encontrando altas emisiones de óxidos nitrosos en vehículos livianos y pesados movidos con diesel, óxidos que contribuyen a la formación del ozono3 -superficial- y del material particulado PM 2,5.

El cálculo de los investigadores estableció 38 000 muertes prematuras por esta razón en 2015 y proyectó 183 000 al menos para 2040.

El estudio fue compartido por la Nasa.

Ante la Sociedad Torácica Americana fue presentado hace una semana un estudio que sugiere que los niveles altos de polución reducen el buen sueño. En donde hubo más óxidos nitrosos (y PM 2,5 derivado) durante cinco años, aumentaba 60% la probabilidad de tener sueño deficiente.

Para Martha Billings, investigadora de la Universidad de Washington, es una muestra de que la polución no solo afecta corazón y pulmones, sino el sueño.

Este mes también, en el Journal of Occupational and Environmental Medicine se publicó una investigación que sugiere que adolescentes expuestos a altos niveles de contaminación por el tráfico automotor presentan un daño específico en su ADN, acortamiento de telómeros, daño que ha sido asociado con el envejecimiento.

Locura

En Translational Psychiatry, científicos de la Universidad del Sur de California presentaron una extensa investigación que sugiere que en sitios donde se excede la norma las mujeres de edad tienen un riesgo 81% mayor de desarrollar alguna forma de demencia y 92% de alzheimer.

Y si sus hallazgos se toman con la población general, la polución del aire sería responsable del 21% de los casos de demencia.

Podría deberse a algún gen crítico del alzheimer que interactúa con el aire sucio.

También, lo que podría explicar distintos casos, investigadores de la Universidad de Leicester publicaron en Environmental Microbiology evidencias de que bacterias que provocan infecciones respiratorias son afectadas por la contaminación del aire, aumentando su potencial infeccioso e incrementando la efectividad del tratamiento con antibióticos.

A los 3,5 años de vivir en barrios con altos niveles de polución, niños pueden experimentar afectación en las células beta, que secretan insulina y mantienen los niveles adecuados de azúcar en la sangre. Es decir, pueden desarrollar diabetes tipo 2.

Este estudio, de científicos de la Universidad del Sur de California y publicado en el journal Diabetes, se hizo con niños latinos.

Explosión de prematuros

Una investigación conducida por el Instituto Estocolmo del Medio Ambiente en la Universidad de Nueva York, sugiere que en 2010 en todo el mundo hubo 2,7 millones de nacimientos prematuros (18% de todos los nacidos antes de tiempo) asociados con la exposición al material particulado fino, PM 2,5. La gran mayoría la aportaron Asia del sur y oriental.

El estudio fue publicado en Environment International.

Por último, científicos de la Universidad John Hopkins encontraron evidencias moleculares y biológicas que sugieren que la exposición al aire contaminado puede hacer que personas mantengan moqueadera todo el año.

Estudios que refuerzan los efectos de la mala calidad del aire en la salud de miles de personas en todo el planeta.

Polución que enferma.