Sísifo, dentro de la mitología griega, como Prometeo, hizo enfadar a los dioses por su extraordinaria astucia. Como castigo, fue condenado a perder la vista y a empujar perpetuamente un peñasco gigante montaña arriba hasta la cima, sólo para que volviese a caer rodando hasta el valle, desde donde debía recogerlo y empujarlo nuevamente hasta la cumbre y así indefinidamente.
No sé vosotros, pero para mí la diabetes es como el castigo de Sísifo, cuando crees que lo estás haciendo bien, y que estás llegando a la cima, de repente la piedra cae por el otro lado de la montaña y vuelta a empezar...
Que por otro lado, y encontrando algo positivo, ejercicio me obliga a hacer, y también a mirarme mucho más que si no tuviera la diabetes, aunque desearía que de vez en cuando me liberaran de esta obligación y me gustaría poder parar un tiempo de empujar esta piedra.
@fer, los castigos de los dioses clásicos tenían muy mala leche, eran retorcidos y sádicos... Lo del pobre prometeo aun fue peor y también es el símil de una enfermedad crónica. Condenado de por vida a que un águila le picoteara el hígado, que cada noche volvía a regenerarse y así hasta el fin de los tiempos. Por fin un alma caritativa (creo q Heracles) le disparo un flechazo al águila y así acabo el castigo de Prometeo. La imagen de Sisifo empujando eternamente el peñasco me sugiere un cansancio eterno y desesperanza, pero también la tenacidad del q no se rinde jamas.
Cierto, empujar perpetuamente esa piedra no me deja apenas tiempo para hacer nada mas.
Y cuando puedo hacer otras cosas como tengo que estar al mismo tiempo controlando lo de "la piedra", no las disfruto. Con lo que al final también dejo de hacerlas.
En 1922 descubrieron la insulina, en 1930 la insulina lenta. ¿Que c*** han hecho desde entonces?
Esta noche hipo de las gordas!!! Así que ya sabéis que día llevo... un poco Sisífico (seguro que este adjetivo no existe). Es cierto que al final renuncias a cosas como dice @"Sherpa41" Ayer fui a la playita y me dí cuenta que llevo sin bucear casi dos años (lo mismo que llevo con el freestyle). Que sí, que puedes dejar de ponértelo 1 día, pero debería calcular cuando "caduca" mi sensor, planificar la inmersión para el día siguiente, meterme bajo el agua 1 hora precisamente el día que no puedo controlar mi glicemia con el stress que eso genera, etc. Total, que para no disfrutar pues no voy, como dice Sherpa.
Je, je, je . A veces puede llegar a ser una roca en vez de una piedra..!! El otro día me propone mi hermana en un bonito día de sol ir a hacer una pequeña ruta de trekking de 2 horitas, 1 horita de ida y 1 horita de vuelta y de repente me dió por soñar cuando no tenía ésta piedra encima; Me levanto de la cama, desayuno mis tostaditas y mi zumito, me pongo mi ropa y zapatillas de deporte, me pongo el Mp3 con mi música favorita y me hago mi trekking de 2 horas y a la vuelta 1 caña de cerveza con una gilda y a la ducha !!! Pero enseguida desperté del sueño, pensé en todas las cábalas de insulina, carbohidratos, geles, Isostar, mochila que tengo que hacer para una cosa tan sencilla como es caminar un par de horitas y la verdad es que de la misma la piedra pudo conmigo y se me quitaron las ganas !!!
Mi hija se lo está tomando con bastante tranquilidad, es como si lo dejara en piloto automático.., medir y comer algo si hace falta..y ya..,no lo piensa mucho. También es verdad que es bastante predecible..
Hija de 35 años , diabética desde los 5. Glico: normalmente de 6 , pero 6,7 la última ( 6,2 marcaba el Free) Fiasp: 4- 4- 3 Toujeo: 20
Jugando un poco "a los clásicos", veámoslo desde otro punto de vista, en este caso desde el mito de Orfeo y Eurídice: la diabetes es nuestra compañera inseparable, un matrimonio eterno, y luchamos para mantenerlo, incluso, bajando al inframundo a por ella. Pero cuando bajamos sólo nos piden una cosa para recuperarla: no mirar atrás. No miréis al pasado, lo que cuesta, lo que te trajo o te quitó, sólo mirad al futuro, lo que la vida te depara.
@fer Muy cierto el mito de Sisifo!!! Y la contínua perseverancia diaria día si día también. Ha veces pienso que quizás he tenido que ser diabética para reempezar cada día, quizás si no fuera por eso a saber cómo estaría..consuelos que se monta una ;)
Totalmente de acuerdo, a veces dan ganas de dejar la piedra que ruede hasta bien abajo y que le den. Yo a veces me siento un poco como el titán atlas, y como si la diabetes fuera el mundo encima
Lo de los griegos clásicos es tremendo; eran de los más libres de por entonces, pero sus personajes sufrían de todo. Yo creo que, después de la función, les daba gustito volver a casa.
Jota dijo: Jugando un poco "a los clásicos", veámoslo desde otro punto de vista, en este caso desde el mito de Orfeo y Eurídice: la diabetes es nuestra compañera inseparable, un matrimonio eterno, y luchamos para mantenerlo, incluso, bajando al inframundo a por ella. Pero cuando bajamos sólo nos piden una cosa para recuperarla: no mirar atrás. No miréis al pasado, lo que cuesta, lo que te trajo o te quitó, sólo mirad al futuro, lo que la vida te depara.
Me encanta esta otra comparación!! ilustra también muy bien la situación con la diabetes! ;)