La diabetes es una de las enfermedades más comunes en todo el mundo, sobre todo en países desarrollados. Los hábitos alimenticios han provocado que además de la de Tipo 1, la incidencia de la de Tipo 2 o diabetes adquirida sea cada vez mayor, aunque una investigación reciente puede dar un vuelco a esos datos.
Científicos británicos han identificado un nuevo tipo de diabetes, la de tipo 3C, incorrectamente diagnosticada como de tipo 2 hasta ahora. Al no estar presente desde el nacimiento, normalmente los doctores dan por hecho que se trata de la que ya conocen y manejan, pero no es así.
La peculiaridad de la diabetes tipo 3C es que no es nada fácil de diagnosticar, pues se produce como resultado de enfermedades que afectan al páncreas. La inflamación de este órgano o pancreatitis es la causa más común, además de la cirugía que afecta en mayor o menos medida al mismo.
Prácticamente la totalidad de personas que la sufren tienen necesidad de insulina, a diferencia de lo que ocurre con la diabetes tipo 2. El problema es que sólo un 2% de los dos millones de paciences que conforman la muestra del estudio fueron correctamente diagnosticados por sus correspondientes médicos.
Los expertos de la Universidad de Surrey alertan de la necesidad de modificar el protocolo de diagnóstico para adaptarlo a esta nueva realidad. Indican que quizás muchos de los pacientes que sufren diabetes tipo 2 pueden encuadrarse dentro de la 3C y necesitan insulina de forma recurrente.
Algunos de los tratamientos utilizados hasta ahora pueden no ser efectivos con este nuevo tipo, un reto para la medicina y el sistema sanitario de todos los países que debe ser afrontado a la mayor brevedad posible. Además, otros remedios alternativos como el cacao o el aceite de oliva no tendrían ningún efecto.
En cualquier caso, siempre es recomendable seguir los consejos de tu doctor independientemente de si estás o no de acuerdo.