La carrera por el centro de la capital vallisoletana sirvió además para diagnosticar la enfermedad.
La marcha comenzó a las 11 horas desde el paseo central del Campo Grande, y recorrió a lo largo de 6 kilómetros las calles Santiago, Plaza Mayor, Duque de la Victoria, Miguel Íscar, paseo de Filipinos y Plaza Zorrilla.
Según explicó la presidenta de la Asociación Diabetes Valladolid, María Ángeles Aguado, "este año la participación se ha doblado respecto a la asistencia registrada en 2015. Ello se ha debido, quizás, a una mayor concienciación de la sociedad para realizar ejercicio físico. Lo que buscamos con esta carrera es concienciar a las administraciones para que traten de luchar contra esta enfermedad y su prevención. La asistencia para la diabetes tipo 2 deja bastante que desear", se lamentó.
Aguado se quejó también de la escasa cuantía de las subvenciones que reciben desde las administraciones, y "sin dinero no podemos hacer nada".
Durante la actividad, apoyada por el Ayuntamiento de Valladolid, la Diputación y empresas colaboradoras, se realizaron en varias carpas pruebas de diagnóstico para detectar la diabetes. Mediante un pinchazo se informaba al participante del nivel promedio de glucosa en la sangre. Al finalizar la carrera, se entregó en la acera de Recoletos a los corredores una bolsa con obsequios facilitados por marcas comerciales.