Ascensia Diabetes Care acaba de comenzar a andar, pese a que hereda una historia de 70 años en el campo de la diabetes. Se estableció a principios de 2016 fruto de la venta del negocio Bayer Diabetes Care -con todos sus productos y servicios para la citada enfermedad- a Panasonic Healthcare Holdings.

Está respaldada con fondos de la firma de inversión KKR y por Panasonic Corporation. "Ambas comparten nuestro compromiso de desarrollar y hacer crecer el negocio, con una visión de futuro y un abordaje más integral de la diabetes", explica a DM Javier Benítez, director general de Ascensia en España. Añade que "en el sector de los medidores de glucosa, nuestra compañía es la única que pertenece a un líder en tecnología: Panasonic HealthCare Holdings".

Ascensia y Panasonic Healthcare operan como empresas independientes, reportando ambas al holding. La primera ofrece productos y soluciones que marcan una diferencia positiva en el día a día de los diabéticos, mientras que Panasonic Healthcare desarrolla, fabrica, vende y distribuye material médico.

Una de sus principales áreas de negocio, In Vitro Diagnostics, incluye sistemas de monitorización de glucosa en sangre y point of care. Otra área, Medicom, desarrolla sistemas informáticos para uso de profesionales sanitarios e historia clínica electrónica, y su área de ciencias de la vida, Biomedical, trabaja en material dental y recuento bacteriano, entre otros.

La compañía busca una mayor autogestión de la enfermedad por el paciente, lo que responde a una necesidad tanto de éste como del sistema, que así reduce costes


Sinergias

Según Benítez, tanto Ascensia como Panasonic "son empresas punteras en la industria global del cuidado de la diabetes, y existen sinergias únicas entre ambas". Ascensia tiene una fuerte presencia en Europa, Oriente Próximo, Asia y Norte América, y cuenta con una amplia experiencia en la venta y distribución de equipos médicos. Panasonic desarrolla y fabrica material médico, y tiene una gran presencia en Japón.

Los productos de Ascensia se venden en más de 125 países, y tras el cierre de la transacción en todas las filiales tendrá más de 1.400 empleados y operaciones en 38 países. "En España, contamos con más de medio centenar de personas y nuestras oficinas centrales están en Cornellà de Llobregat, Barcelona". La filial lleva creciendo por encima del mercado los últimos años gracias al lanzamiento de la tira reactiva Contour Next y a los medidores de glucosa de la familia Contour Next.

Benítez indica que la innovación y la investigación son una prioridad en la compañía. "Tenemos un pipeline muy competitivo, basado en el desarrollo de programas de investigación realmente innovadores. Uno de nuestros focos prioritarios en I+D es mejorar los resultados en salud, yendo un paso más allá mediante una gestión interconectada de la diabetes, la recolección, análisis e interpretación de los datos de salud".

"La transformación -añade- será progresiva: vamos a evolucionar de forma sostenible, sólida y fieles a nuestros valores. Estamos empezando y tenemos muy claro hacia donde vamos: queremos seguir desarrollando nuestra línea de productos con el objetivo de que se nos reconozca como líder mundial en soluciones de alta calidad".

La compañía colabora con profesionales de la salud y de otros campos "para que nuestros productos alcancen los más altos estándares de precisión y exactitud, y ayuden a los diabéticos a manejar la enfermedad, sin importar el tipo ni el grado de evolución o frecuencia de los controles de glucosa necesarios".

Su extensa cartera permite incorporar la medición de glucosa más fácilmente en su vida diaria de los pacientes, ya que se adapta a las distintas necesidades. "Estamos comprometidos a seguir investigando, innovando y desarrollando nuevos productos que mejoren la adherencia y confianza de las personas con diabetes.

Paciente activo

Benítez recuerda que el principal reto del manejo de la diabetes es aumentar el papel activo del paciente, especialmente en la autogestión de su enfermedad.

"Nosotros tenemos que dar respuesta a esa necesidad tanto del paciente como del sistema sanitario, ya que numerosos estudios demuestran que una mayor autogestión de la diabetes reduce el riesgo de importantes complicaciones derivadas de la enfermedad, lo que a su vez ayuda a reducir costes para la Administración y podrá hacer más sostenible nuestro sistema sanitario".

En concreto, el coste anual por persona para el sistema sanitario es un 67 por ciento más elevado entre diabéticos.

La fórmula empleada para ello no se limita al desarrollo de medidores de glucosa, sino también de "soluciones innovadoras, relevantes, de futuro, seguras y fiables, que simplifiquen las vidas de los pacientes y contribuyan a mejorarlas", concluye.