El sencillo gesto de separar la sal del azúcar puede ser clave en la lucha contra la diabetes tipo 2.
Hasta ahora se creía que el azúcar era uno de los grandes causantes de la diabetes tipo 2. Ahora, un equipo de investigadores franceses descubrió que combinar azúcar y sal en la comida es todavía peor.
Un equipo del Instituto Francés de Salud y de Investigación (Inserm, por sus siglas en francés) se dio cuenta que la cirugía de bypass gástrico (reducir el tamaño del estómago quirúrgicamente) en pacientes voluntarios diabéticos reducía la absorción de azúcar en la sangre tras las comidas.
La absorción de azúcar se limitaba con esta operación a la parte inferior del intestino y al contacto con la bilis.
Los investigadores después estudiaron los efectos de esta cirugía en cerdos miniatura, que son mamíferos omnívoros con una anatomía digestiva y fisiología muy similar a la nuestra.
Al añadir sal a la comida de los cerdos operados, descubrieron que se restablecía la absorción de azúcar en el intestino superior, provocando un aumento en los niveles de azúcar en la sangre.
Por tanto, la sal estaría jugando un papel fundamental en la absorción de glucosa o azúcar en el intestino que a su vez tiene una influencia directa sobre la diabetes tipo 2. Este tipo de diabetes, después de todo, es un trastorno metabólico que se caracteriza por la hiperglucemia, un nivel alto de azúcar en la sangre.
Esta enfermedad afecta sobre todo a los adultos, unos 300 millones en todo el mundo. “Uno de los primeros síntomas de la diabetes tipo 2 en la gente sana es que aumenta el nivel de glucosa tras la comida“, afirmó a BBC Mundo François Pattou, uno de los autores de la investigación.
“Por tanto, es importantísimo tener cuidado en no consumir demasiada azúcar, combinada con sal, en las comidas. Esto es cierto tanto para personas que padecen diabetes tipo 2, pero sobre todo para aquellas que en teoría estén sanas”, añadió.
Reducir la sal y el azúcar es especialmente importante en la gente sana, según los investigadores.
Pattou advirtió que la gente en general consume tres veces más sal de lo que deberían, además de mucha más azúcar de lo aconsejado. Agregó que limitar el consumo simultáneo de azúcar y sal, evitando productos como dulces salados, es algo relativamente sencillo de hacer y que reduciría enormemente el riesgo de padecer diabetes tipo 2.