Cada hora extra de tiempo diario que se permanece sentado, por ejemplo, delante del ordenador, se asocia con un 22% más de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, según concluye un nuevo estudio publicado en Diabetologia, realizado por Julianne van der Berg, de la Universidad de Maastricht, Holanda, y sus colegas.
La investigación analizó las asociaciones transversales de la duración total del tiempo sentado y los patrones de comportamiento sedentario con el estado del metabolismo de la glucosa y el síndrome metabólico. Los participantes del estudio utilizaron el acelerómetro activPAL3, que clasifica la conducta sedentaria utilizando datos sobre la postura y que ha demostrado ser un medio preciso para evaluar la conducta sedentaria.
Se tomaron datos del Estudio de Maastricht, un análisis observacional de cohortes prospectivo basado en la población de Países Bajos. Los autores incluyeron a 2.497 participantes (con una edad media de 60 años, 52% hombres) a los que se les pidió llevar el acelerómetro durante 24 horas ocho días consecutivos. Los autores calcularon la cantidad diaria de tiempo sedentario, el número diario de descansos de estar sentado, el número de periodos sedentarios prolongados (de 30 minutos o más) y la duración media de estos periodos de estar sentados. Para determinar el estado de la diabetes, los participantes se sometieron a una prueba de tolerancia oral a la glucosa.
En total, 1.395 participantes (56%) tenían un metabolismo normal de la glucosa, 388 (15%) presentaban un metabolismo de la glucosa alterada y 714 (29%), diabetes tipo 2. Los participantes con diabetes tipo 2 pasaron la mayor parte del tiempo sentados, hasta 26 minutos más por día en comparación con los participantes con una alteración del metabolismo o la glucosa normal. El mayor riesgo de diabetes por cada hora adicional de tiempo de sedentarismo fue del 22%. No se observaron asociaciones significativas para el número de descansos de sedentarismo, el número de periodos prolongados sedentarios o la duración media de estos tiempos sedentarios con la diabetes.
Los autores creen que deberían realizarse estudios futuros en los participantes con diabetes tipo 2 para confirmar estos resultados, ya que sus hallazgos podrían tener implicaciones importantes para la salud pública, al sugerir que la conducta sedentaria puede jugar un papel importante en el desarrollo y la prevención de 2 diabetes, independientemente de la actividad física de alta intensidad.