Más allá de medir el pulso, el sueño o las calorías consumidas. El desarrollo de los wearables de salud, y concretamente aquellos vinculados con la diabetes, todavía no conoce fronteras. Recientemente, el diario The Verge desveló una interesante patente realizada por Google en 2014.
Se trata de un wearable, con forma de smartwatch, que mediría el nivel de azúcar en sangre sin agujas. Una innovación que beneficiaría a los más de 380 millones de diabéticos que hay en el mundo (5.8 millones en España) según la Organización Mundial de la Salud.
Las patentes de Google en wearables para diabéticos
¿Cómo funcionaría este wearable? La patente realizada por Google describe un sistema de extracción de sangre que, en lugar de agujas, usa gas a presión con micropartículas que perforan la piel. Una vez la sangre es liberada, el dispositivo, con forma de pulsera, la aspira para su análisis. De esta forma, diabéticos y personas con fobia a las agujas, encontrarían una alternativa para el control de sus niveles de azúcar.
Aunque destacable, ésta no es la primera patente de Google relativa a wearables para diabéticos. Hace apenas unos meses, conocíamos un proyecto de lentes de contacto dotadas con conectividad inalámbrica y un sensor que analizaría el nivel de glucosa a través de las lágrimas del portador. De forma resumida, estas lentillas estarían formadas por dos capas y, entre ellas, estaría protegidos los componentes necesarios para su funcionamiento.
Lentillas de contacto Google diabéticos
Estas patentes de Google, pendientes de aprobación por la FDA, representarían una alternativa no invasiva a la extracción con agujas y, por tanto, un avance en la calidad de vida de las personas con diabetes. Porque, entre otras ventajas, el análisis realizado podría vincularse con una aplicación para el smartphone donde el usuario podrían acceder al histórico y, al tiempo, compartirlo con su médico.
El negocio detrás de la investigación
Google, preguntada por The Verge sobre la última patente, no confirmó nada al respecto. Sin embargo, los cerca de 30 millones de pacientes con diabetes en Estados Unidos y sus esfuerzos en investigación, parecen desvelar un interés real por hacer realidad estos wearables para diabéticos.