"Sientes como que estás mareado y te duelen los ojos". "Tienes que pincharte y te duele un poco a veces". "Con el taller aprendo a comer cosas sin azúcar que no he descubierto".

Estas son algunas de las frases que se escucharon de las experiencias de los participantes en el campamento para niños con diabetes la pasada semana en la entrevista realizada a la psicóloga sanitaria y "coach" alimentaria Elsa Espinosa en el programa de El Día Televisión "Un Día Más".

Aunque no todos los niños que se apuntan a esta experiencia tienen diabetes, ellos son la prioridad de este campamento ubicado en el municipio de El Rosario y gestionado por el Cabildo de Tenerife. Desde la Asociación para la Diabetes de Tenerife, explican que la labor de este colectivo busca "enseñar a afrontar distintas situaciones para manejar la diabetes".

Una comida familiar, un cumpleaños infantil, puede suponer un problema sin las estructuras necesarias. La clave, explica la experta, "se encuentra en la sensibilización e información del entorno. La diabetes no es ninguna alergia alimentaria y hay que controlar la cantidad de hidratos que estamos consumiendo. Teniendo este trabajo controlado, el niño puede tomar refrescos sin azúcar y tomar su tarta, pero el entorno tiene que estar informado".

La medida del grado de preocupación y capacidad de gestionar esta circunstancia, desvela Espinosa, no está localizada en el menor, sino en los adultos que lo rodean. "Los niños", asegura, "valoran la diabetes a través de la mirada de los adultos". De modo que para facilitar una vida sana mentalmente hablando para los niños con diabetes "el entorno escolar debe estar sensibilizado, desde la cocina a cuidadores de comedor".

En el caso de la diabetes de tipo 1, informa la experta, "hay que ayudar a encajar una noticia repentina que llega muchas veces con lo que llaman un debut y requiere tratamiento inmediato".

En este caso para los pequeños, "de nuevo la preocupación es el entorno, por eso en el campamento damos oportunidades para que se expresen, hablen de todo lo que les inquieta...".

Curiosamente, no es vivir una hipoglucemia, o un mareo, "sino cómo responden los demás cuando se ponen así. Hay padres que se angustian demasiado y lo transmiten, o piden al niño toda la información de qué hizo para estar así sin que su hijo aún se haya recuperado".

Con la diabetes de tipo 2, ligada a hábitos de vida Espinosa señala que "la clave en este caso del comportamiento adulto es el ejemplo. No consumir bollería o bebidas azucaradas y cambiarlas por opciones sabrosas pero sanas evitará problemas en la familia". Parece sencillo pero "Canarias tiene esta asignatura pendiente. Estamos a la cabeza de la obesidad infantil. Comer con poca calidad puede degenerar en una diabetes".

Todavía hay plazas desiertas para este campamento saludable, que funciona desde hace varios veranos con éxito. Para obtener más información, la ADT ha facilitado un número de teléfono (922253906) y una dirección de correo electrónico: trabajosocial@diabetenerife.org.