Es en la Universidad de Cardiff donde un grupo de investigadores han empezado a trabajar en un proyecto que consiste precisamente en encontrar un método alternativo a los pinchazos para obtener la glucosa en sangre, concretamente se trata de hacer uso de las microondas.
¿Es esto seguro para nuestro organismo? Es lógico que surja esa pregunta, ya que no es muy convencional lanzar ondas microondas contra nuestro cuerpo. No hay por qué preocuparse, según dicen la cantidad de ondas que se emiten es cercana a 1000 veces inferior a la que emite un teléfono móvil, aunque esto ya se encargarán de certificarlo los organismo correspondientes algún día.
Funcionamiento Swansea diabetes microondas
El funcionamiento del aparato es muy sencillo, además de que amplía las posibilidades conocidas hasta ahora. La idea es que vaya puesto, igual que el smartwatch que Google patentó, y consiste en un dispositivo como el que veis sobre estas líneas que se adhiere a nuestro brazo por medio de un adhesivo –si me permitís la redundancia– y estiman una duración de treinta años para él. Además, incluye la posibilidad de realizar un envío mediante Bluetooth de los datos que recoge a, por ejemplo, una aplicación móvil que lo acompañe.
Con esto podríamos conseguir tener un control total de nuestro estado desde nuestro teléfono, incluso se le podrían programar revisiones periódicas y que nos envíe una alerta cuando bajemos de un nivel en concreto. El medidor en cuestión no utiliza ningún tipo de componente químico, de ahí su durabilidad, y solo necesitará una extracción de sangre inicial para hacer las calibraciones oportunas.
Es en la Universidad de Swansea, en la Facultad de Medicina, donde están haciendo pruebas con unos 50 pacientes que en general se muestran contentos con los resultados y la experiencia. No obstante, desde allí afirman que no es lógico pensar en comercialización hasta dentro de unos 5 años, por lo que habrá que esperar un poco aún. En ese tiempo, se emplearán en estudiar aún más los resultados y optimizar el diseño lo máximo posible