España ocupa el penúltimo puesto en el uso de las bombas de insulina como tratamiento para la diabetes con un 4%. Estos son datos recogidos por el Grupo de Tecnología en Diabetes FENIN. Con el objetivo de mejorar la calidad de vida del paciente con Diabetes Mellitus tipo 2 (DM1), la Federación Española de Diabetes (FEDE) ha iniciado la campaña "La diabetes no descansa, tú sí".
Con este sistema integrado, se mejora el tratamiento de la diabetes y el control de las complicaciones derivadas de la patología como puede ser la hipoglucemia. En nuestro país, se diagnostican un total de 1.235 casos nuevos de DM1 en menores de 15 años cada año y en este sentido, el 76% no consigue tener un control glucémico adecuado.
“La aparición en los últimos años de innovadoras tecnologías en el tratamiento de las personas con DM1, tales como el sistema integrado de infusión subcutánea continua de insulina con la monitorización continua de glucosa y la evidencia científica de su eficacia en la mejora del control metabólico, calidad de vida y clara disminución de complicaciones agudas de alto coste sanitario como las hipoglucemias, es lo que ha llevado a FEDE a movilizarse y defender los derechos de los pacientes con diabetes tipo 1”, ha asegurado Andoni Lorenzo, presidente de la FEDE.
Las nuevas tecnología han ayudado al control de la DM1. Para el control de la DM1 y la consecuente reducción de sus complicaciones se intenta conseguir una mayor monitorización de la enfermedad. Un ejemplo de ello es la bomba de insulina, que actualmente cuenta con un sistema de monitorización integrado capaz de evitar la hipoglucemia en el 83,1% de los casos y avisar al paciente mediante un sistema de alarma.
A pesar del nivel de efectividad y eficiencia de la terapia, las nuevas tecnologías tienen un grado de penetración en nuestro país sorprendentemente bajo. Actualmente solo utilizan tratamiento con bomba de insulina en torno al 4% de los diabéticos tipo 1 en España, frente a más de un 46% en Noruega o un 30% en Eslovenia, situándose la media en Europa alrededor del 15%.
“El objetivo de la campaña también es evitar, en la medida de lo posible, la inequidad entre comunidades autónomas. Actualmente, los diferentes datos de penetración de los tratamientos por comunidad autónoma muestran la diferencia entre regiones españolas, inequidad que se incrementa dada la no financiación de tratamientos, como los que ayudan a monitorizar los niveles de glucosa, lo que provoca diferencias en la posibilidad de acceso a tratamiento”, reivindica el presidente de FEDE.