Si se tiene Diabetes el consumo de alcohol debe ser controlado, sobre todo, se debe cuidar los niveles de glucosa para que una o dos copas no los alteren. Puede que la propia insulina ya no sea capaz de bajar el nivel de azúcar y las personas se vuelvan intolerantes a su propia insulina.
Existen consecuencias en el organismo a la hora de incorporar bebidas alcohólicas, por ellos siempre se debe consultar al médico sobre la cantidad que se puede tomar, pues quizá, de acuerdo al consumo, él deba modificar el tratamiento para evitar niveles altos o bajos de azúcar.
CONSECUENCIAS DE TOMAR ALCOHOL
1. Alerta de hipoglucemia
El hígado bloquea la producción de glucosa y contribuye a que se presente una hipoglucemia ya que se produce un efecto sedante y disminuye la alerta de los sentidos por lo que es posible sentir mareo, dolor de cabeza o sueño. Se debe tener mucho cuidado si se toman bebidas alcohólicas con el estómago vacío pues el nivel de azúcar en sangre podría bajar demasiado.
2. Alerta de hiperglucemia
Otras personas en lugar de hipoglucemia presentan hiperglucemia (azúcar alta), y se puede sentir mucha sed, náuseas, cansancio, visión borrosa, entre otras; es por eso que se deben medir los niveles de glucosa antes y después de tomar alcohol para poder diferenciarlas y actuar de acuerdo al resultado.
3. Medicamentos sin resultados
El alcohol descompensa el organismo y provoca que los medicamentos pierdan efectividad. Si se bebe y se utilizan medicamentos para controlar los niveles de azúcar, se debe hablar con el Médico para saber si es necesario modificar la dosis de los hipoglicemiantes que se toman.
4. Resistencia a la insulina
Si se ingiere demasiado alcohol (más de una o dos copas) la propia insulina ya no es capaz de bajar el nivel de azúcar, así que las personas que padecen Diabetes se hacen intolerantes a su propia insulina. Esta resistencia puede ocasionar daño orgánico total a las células BETA, productoras de insulina.
Fuente: diabetesbienestarysalud.com