Un estudio ha encontrado que las dietas muy bajas en carbohidratos pueden mejorar los niveles de azúcar en la sangre en personas con diabetes tipo 1, algo que anteriormente se consideraba discutible.
Lo que ha sido discutido por décadas, y se ha calificado de controvertido, es ahora comprobable gracias a un nuevo estudio que concluyó que una dieta los suficientemente baja en carbohidratos podría ser de ayuda a las personas con diabetes tipo 1.
El estudio fue publicado en la revista científica Pediatrics, y fue dirigido por investigadores del Boston Children’s Hospital.
En total, se analizaron 316 personas, que habían sido encontradas en un grupo de Facebook que aboga por una dieta muy baja en carbohidratos para la diabetes tipo 1. En el estudio, 138 personas habían sido diagnosticados efectivamente con diabetes, y el 42% de los participantes eran niños. Tenían una ingesta diaria media de carbohidratos de 36 gramos, que era solo el 5% de sus calorías totales. Eso es mucho menos que el 45% recomendado por la Asociación Americana de Diabetes.
Los resultados de quienes seguían dietas bastante bajas en carbohidratos fueron de hecho interesantes: los participantes informaron valores de hemoglobina A1c, que son la medida principal de azúcar en sangre, de solo 5.67%. El objetivo es mantenerlo por debajo del 7% en personas con diabetes tipo 1, lo que significa que necesitan dosis de insulina más bien pequeñas.
“El control de azúcar reportados (por los pacientes del grupo observado) eran casi demasiado buenos para ser ciertos” dijo a The New York Times Belinda Lennerz, del Boston Children’s Hospital, y autora principal del estudio. “No es nada parecido a lo que vemos generalmente en nuestra clínica especializada en diabetes tipo 1″.
La idea de una dieta baja en carbohidratos para combatir la diabetes tipo 1 es un tanto controvertida y ha sido ampliamente discutida por dietistas, nutricionistas y médicos de todo el mundo, ya que generalmente se cree que podría aumentar el riesgo de caídas peligrosas en el nivel de azúcar en la sangre conocidas como hipoglucemia. Pero en este estudio, las tasas de hospitalización por hipoglucemia fueron solo del 1%, una cantidad más baja de lo usual.
Sin embargo, hubo limitaciones en el estudio ya que fue observacional, no controlado, y los participantes registraron gran parte de sus propios datos. Por lo tanto, los autores señalan que se necesitará un ensayo clínico aleatorizado para ver si esta dieta es tan exitosa como se alega, y también que es segura. Advierten además que los pacientes con diabetes tipo 1 no deben cambiar su dieta sin antes consultar a su médico respectivo.